viernes, 5 de diciembre de 2014

El despertar de mañana, a 4.000 millones de kilómetros


 
Distancia: 4.773.736.000 kilómetros de la Tierra.

Hora: las 3 en punto de la tarde de mañana sábado, 6 de diciembre de 2014, hora de la costa este de los EEUU.

Una pequeña sonda despertará de su letargo.

Se llama New Horizons
 

Lleva viajando desde enero de 2006, y es muy rápida. Ha llegado a alcanzar una velocidad de 54.000 kilómetros por hora. Tardaría 36 segundos en llegar de Madrid a Sevilla, y 6 minutos de Nueva York a París. Y, con todo, la New Horizons no es el objeto más rápido creado por el hombre; este récord le corresponde a la Voyager I que está mucho, mucho más lejos.

Quería dejar constancia del hecho: a las 10 de la noche de mañana, hora de Madrid, un objeto fabricado por el hombre acabará con una larga hibernación. En la oscuridad de esas distancias impensables, una lucecita dará cuenta de que los sistemas comienzan a funcionar de nuevo.

Será un largo desperezar. La New Horizons tardará una hora y media en despejarse lo suficiente como para enviar un primer mensaje a la Tierra: todo va bien.

Me he despertado.

La sonda está tan lejos que su mensaje, que saldrá a las 11:30 de la noche, viajando a la velocidad de la luz, necesitará 4 horas y 25 minutos para cubrir la distancia que le separa de la Tierra.

A las 4 de la madrugada del domingo, las 9 de la noche hora de los EEUU, recibiremos el saludo de la New Horizons.

Enseguida se pondrá a trabajar; tiene que comprobar si los datos de navegación funcionan correctamente. Fijará su mirada en el cercano Plutón, antaño planeta, hoy uno de los muchos grandes cuerpos que gravitan el conocido como cinturón de Kuiper, una zona casi desconocida de nuestro sistema solar.

En un pequeño compartimento, a modo de homenaje, La New Horizons guarda unos gramos de las cenizas de Clyde Tombaugh, el astrónomo que descubrió Plutón en los años 30.
 
En marzo comienzan las primeras observaciones y estudios de Plutón. El miércoles 15 de julio La New Horizons se aproximará a sólo 12.000 kilómetros de Plutón, y sobrevolará Caronte, su enorme luna.

Hasta siete instrumentos científicos estudiarán la superficie y atmósfera del cuerpo, empleando menos energía que la que necesitan dos bombillas de 100 vatios.

Se enterarán. Será noticia – breve – en todo el mundo.

¿Y después?

Había un reto: aproximar la New Horizons a alguno de los enormes cuerpos que hemos detectado en el cinturón de kuiper, algunos, como Eris, mayor incluso que Plutón. Pero están demasiado lejos; es posible que la New Horizons pueda estudiarlos con su cámara de alta resolución y gran alcance. También se especulaba con poder resolver el llamado enigma del “acantilado de Kuiper”, del que ya hablé en una ocasión:
Ver artículo sobre el Acantilado de Kuiper

Pero conviene ser realistas, y estos últimos años, desde el 2011, los astrónomos se han afanado en la búsqueda de cuerpos al alcance del New Horizons. Era una tarea desesperante: son cuerpos muy pequeños, apenas 10 veces más grandes que un cometa, entre 55 y 35 kilómetros de diámetro, y están muy lejos.

No se encontraba nada.

Finalmente, no hace mucho, el Hubble detectó tres cuerpos accesibles desde el New Horizons. Acercándonos, podremos estudiar los orígenes de nuestro sistema planetario.

 
Bueno, eso es todo. No gran cosa. Mañana despertará un fruto del ingenio humano a miles de millones de kilómetros. No es tan importante como la liga de fútbol o las noticias de sucesos.

Pero sucederá. Y ¿saben?, será un pequeño logro de todos, como miembros de una especie de exploradores.

Yo, al menos, así lo siento. Y quería compartirlo.

Antonio Carrillo

2 comentarios:

  1. Gracias Antonio. Un placer leerte, como siempre. No te canses nunca!!!

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