No me gustan
las frases cotidianas.
No me gusta
que tengas que venir.
No me gusta
volar por la mañana,
saltar por la ventana
buscando una perdiz.
No me gusta
vivir de la paciencia.
No me gusta
que dejes de llorar.
No me gusta
mentirte de mentira,
y que sea verdad.
No me gusta
vivir una aventura.
No me duermas
si quieres descansar.
No me gusta
tener razón en todo,
ser cómplice de un robo
antes de despertar.
Esta tarde
no tengo tanta prisa.
Me he cansado
de ser tu corazón.
Es curioso.
Precisamente ahora
necesito calor.
No me gusta
que me hables del trabajo.
No me gusta
caminar por caminar.
No me gusta
tener tanto apetito,
sentirme pequeñito,
tener miedo a callar.
Es mi mente,
ya sabes que no sirve.
Son mis ojos,
cansados de mirar.
Son mis dedos,
que buscan el consuelo
de la arena del mar.
Lo lamento,
hoy tengo un mal día.
Es la casa.
Me huele a eternidad.
No te pido
que seas mi consuelo.
Sólo déjame
en paz.
Antonio Carrillo
No hay comentarios:
Publicar un comentario